Jaime Munguía le dio a todo el público detractor la noche más espectacular de toda su carrera venciendo a un durísimo y subestimado Derevyanchenko que en ningún momento antepuso el cheque.
Tras sonar la ultima campanada la avalancha de comentarios que catalogaban el combate como la mejor pelea del año no se hizo esperar.
Estaba cantado desde el anuncio que los estilos se iban a acomodar para regalarnos una combinación espectacular y no hubo un solo round en que decepcionaran.
Y es que, es momento de abordar el tema por sus aristas por que hay quienes se convencieron de que Munguía puede trascender hasta cierto punto en las 168 y otros a los que solo les reafirmó que contra otro pegador en un mejor momento su invicto se terminaría.
Así es que vamos a comenzar con las reflexiones positivas tras el combate.
¿Demostró Jaime Munguía calidad suficiente?
A mi juicio creo que si, el tijuanense puede competir contra peleadores que ejerzan una propuesta como la Derevyancheko y competir. De eso a ganar existe el “porvenir”.
Lo platicamos en el podcast semanal y Munguía muestra sus mejores virtudes a partir de sus peores defectos.
En concreto resalta su asimilación y la manera de meter presión. Ambas características probadas por los puños del rival y el apuro de cerrar el combate antes que se salga de control.
Con base en una gran talla y fortaleza física, Jaime puede anteponerse a golpes que derribarían a cualquier. Para muestra las 2 manos que conectó Derevyanchenko en el 4 asalto y que no inquietaron al mexicano.
En cuanto al fondo físico, el Tijuanense llega cada vez más grande y no le merma el aire. Claro está que su juventud es la fuente de dicho tesoro pero también que para cualquier boxeador es una cualidad envidiable. Peleó fuerte y presionó al ucraniano hasta dejarlo sin aliento, aún así la pelea continuaba y no parecía cansarse.
Jaime Munguía es el modelo de boxeador mexicano que a base de huevos, resistencia, condición y manos pesadas puede conseguir lo que otros con mayor talento no pueden.
El tijuanense está listo para afrontar lo que venga. Que pueda ganar o perder es otra cosa pero está claro que (desde el punto de vista aficionado) no hay más razones para cuidarlo.
¿Perderá en cuanto la oposición suba de tono?
Lo más probable es que si y lo puedo responder contundentemente luego de ver posiblemente su mejor noche. Jaime perderá eventualmente pero no por eso será menos o más.
Erik Morales (a quien personalmente he cuestionado por la defensa de Munguía) parece haberse dado cuenta que hay puntos clave a resolver si quiere mantener a su pupilo ganando. En la conferencia de prensa posterior reconoció mucho que trabajar en el aspecto defensivo y en el ímpetu.
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Terrible ha enseñado como pelear gustando a la gente, sin lugar a dudas lo ha hecho muy bien si hay que tomar en cuenta su combate más reciente.
El problema de ganar gustando radica en salir golpeado y el colmo es hacerlo ante rivales de poca monta.
Si Munguía debe arriesgar algo tiene que hacerlo contra los peces gordos. Pueden irse haciendo a la idea que no será el boxeador más técnico y que perderá en algún momento pero si es capaz de vencer a oponentes de cartel con este boxeo se ganará a la gente.
Con la gente en la bolsa vale madres ganando o perdiendo, el seguidor o el detractor al final lo que quieren es espectáculo.
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